HISTORIA


         

RESTOS DE OTRAS CIVILIZACIONES: Aunque según narra el Pleyto de Aprehensión de la Baronía de Gurrea, la fundación de Las Casas de La Paúl se produjo en 1752, no hay que desdeñar los continuos restos que van saliendo por sus alrededores y los parajes como la Peña Mascarada y la Cueva de los Moros.
   Sería un entorno, que aproximadamente ocuparía desde la Peña Mascarada hasta el Morrico de Puy-Águila. Aunque es un yacimiento, que los conocidos de la materia definirían como destruido o mal conservado; a nosotros nos es suficiente para saber que hubo romanos, árabes e incluso indicios anteriores. Lo sabemos por cerámica, restos óseos, piedras de sillería, cristal y monedas romanas.






Cerámicas varias


Monedas varias.

   El propio nombre Puy-Águila es de origen romano, significa punta (donde más ha quedado es en las Galias francesas). Una traducción más acertada sería Punta del Águila haciendo referencia a estas aves o también al sitio estratégico en el que se encuentra (poblado con habitantes a sus pies y vigilantes en el pico), indudablemente la posibilidad de vigilancia sería enorme pues se ve Gurrea, Zuera y todo el desierto de la Violada delante.


Vista de La Paúl desde Puy-Águila.

   En relación a los árabes, nos dejaron el Castillo de Salcey (del que no hablamos, porque tiene apartado propio en este blog), la Cueva de los Moros y la Mina para el paso de la Acequia Madre, que riega toda la huerta (entonces un trocito de tierra pues el río discurría más cercano al actual trazado de la carretera.
   También sabemos de la existencia de 2 pequeñas Villas romanas en nuestras proximidades: el Villar de San Bartolomé encima de la peña de la Hermenada y el Villar de San Cristóbal al costado del barranco del Tejar. Es lógico que existan estos dos puntos de referencia (y los habrá seguramente por todo el costado del río), porque por la margen derecha del Gállego discurría la ruta de Trajano, desde Valencia al sur de Francia por Teruel, Zaragoza, Zuera y Jaca.
   En referencia a la Peña Mascarada, hay nuevos descubrimientos que se relatarán en mi próximo libro sobre La Paúl.


Peña Mascarada 


Cueva de la Agüelica Pez.


Entorno del Huerto de Las Oliveras (donde aparecen restos)


Cueva de los Moros


Piedra de molino manual, hallada durante las obras de la carretera.
(mineral: piedra de lava volcánica)


Piedra de molino manual, hallada en el Villar de San Bartolomé.
(mineral: piedra de arena)


Restos hallados en el entorno del Huerto de las Oliveras y morrico Puy-Águila.


Piedra de molino manual, hallado en el Villar de San Cristóbal.
(mineral: piedra de arena)


Piedra de molino manual, fotografiada en la Mina.
(mineral: piedra de arena)


LOS PROLEGÓMENOS, BARONÍA DE GURREA: En tiempos del rey Don Pedro I, estando éste en el sitio de Huesca, fueron a servirle los hermanos Infanzones del apellido López de Murillo, y eran de la montaña de Aragón y por lo que allí le sirvieron en la batalla del Alcoraz, les dio por armas los dos lobos de oro en campo colorado. El mayor, Don Ximén o Jimeno, sirvió también al rey Don Alfonso "El Batallador", y por servicios que le prestó en Fraga, le dio la Villa y Castillo de Gurrea en el año 1134, mes de enero. Tomando esta Villa el escudo de armas de dichos hermanos.
   Este fue el comienzo de tan dilatada Baronía, que duró hasta la Guerra Civil. Las grandes familias que contribuyeron a esta Baronía fueron las siguientes: Los López de Gurrea, los Condes del Villar, los Funes y Villalpando, los Luna, los Francés de Urritigoiti, los Marin de Resendi, los Condes de Atarés, los Bardaxí, los Abarca y Bolea, los Castro y Moncada, los Cerdán, los Borja, los Torrellas, los Sanz de Latrás, los Contamina y los Parcent.
   Que tengan que ver con Las Casas de La Paúl, solo son los Sanz de Latrás (condes de Atarés), los Contamina y los Parcent.

EL ENTORNO: Hay que imaginarlo partiendo desde Gurrea, allí desemboca en el Gállego el río Sotón (antes Setón). En la margen derecha del Gállego todo el terreno de pastizales sin cultivar, tanto el monte del Pocico, como el Tejar, como el Llano, como la Val de San Bartolomé, como la Plana y lo más importante la Huerta.
   Todo este entorno lo empleaba el barón de Gurrea para arriendos de pastos a los ganaderos montañeses durante el invierno, por un dinero y además por la Décima (uno de cada diez corderos nacidos dentro del término de la baronía eran para el conde) y además la Primicia (y de esos diez el mejor de ellos).
   Entre la actual huerta y el monte existía una pardina llamada La Paúl, cuyo significado en aragonés quiere decir más o menos, terreno pantanoso cubierto de hierba o más claro soto, en definitiva huerta, entonces todavía sin roturar. 

FUNDACIÓN DE LAS CASAS DE LA PAÚLYa estamos en el punto que queríamos para explicar el porqué de Las Casas de La Paúl (nombre antiguo). 
   En la baronía de Gurrea, había muerto el 24º Barón de Gurrea y 5º Conde de Atarés Don José-Pedro Alcántara Funes de Villalpando Sanz de Latrás (al cual se le había concedido el título de Grande de España de 1ª Clase el 20 de noviembre de 1725, por real despacho de 11 de diciembre del mismo año), estaba casado con María Francisca Abarca de Bolea (hermana del 12º Conde de Aranda), con la cual había tenido dos barones Cristóbal-Pío y Ambrosio-Mariano y una hembra llamada María Francisca que fue religiosa. 
   Según cuenta El Pleyto de Aprehensión de la Baronía de Gurrea, la condesa viuda Doña Francisca Abarca y Bolea, por el año 1752, se había percatado de la buena calidad de las tierras de la Pardina de La Paúl y había decidido ararlas y roturarlas para beneficio de la Baronía y del Estado, pero esto lo realiza su hijo primogénito y heredero de la baronía, Don Cristóbal-Pío Funes de Villalpando Sanz de Latrás Abarca y Bolea (su hermano Ambrosio-Mariano lo nombran Conde de Ricla). 



Cuadro que se encuentra en el Convento de Capuchinas de Huesca.
Don Cristóbal-Pío Funes de Villalpando Sanz de Latrás Abarca y Bolea
Fundador de Las Casas de La Paúl


   En la parte inferior derecha del cuadro pone: 

El Exmo. Sor. Don Chistoval Pio 
Funes de Villalpando Conde de Atarés
y del Villar, Sor de las Varonias de Quinto 
Gurrea y Figueruelas, Grande de Espa
ña de primª clase, Gentilhombre de Camara 
de S. M. Mayordomo mayor de la 
Reyna N. S. Cavallero de la Insigne 
Orden del Toison de Oro, y de la Gran
Cruz Española de Carlos III, Fundador
y Patrono del Conbento de Capuchinas de 
la Ciudad de Huesca, y especial Bien
hechor, Suplica a esta Sta Comunidad
lo encomienden á Dios particularmente.


   En el relato del Pleyto de Aprehensión de la Baronía de Gurrea (1795-1803), en su punto 1º dice: Que en 20 de setiembre de 1571 se otorgó Escritura Pública entre Don Pedro Vitales Prior del Priorato de Gurrea y Don Miguel de Gurrea, dueño temporal de la Villa y su Honor y señaladamente de las Partidas de La Paúl, Faxas, Valles de Gracia , Bartolomé, Llano de San Cristóval, Sotico de la Barca, en la que de todas ellas era diezmador el citado Prior. Y en referencia a la partida de la Paúl y el Llano habían estado y estaban de tiempos imemoriales incultas, sirviendo solamente para pasto de ganado lanar, Bueyes y otros animales. Y en relación en concreto a la Val de San Bartolomé y el Plano de San Cristóbal (el Llano), se arrendaban a ganaderos forasteros con el pago de la décima y la primicia de los corderos nacidos y la lana, pero los frutos resultantes no eran rentables, pues los ganaderos sacaban el ganado para esquilar y las ovejas que tenían que parir fuera del término de la Baronía.
   Se hace cargo otra vez de las partidas referidas Don Miguel de Gurrea, con la intención de poner en riego los sotos, construyendo los azudes y las acequias a su costa, literalmente (construyendo en el Río Gállego un azud y acequia, con la qual se conduxere á ella el agua, cuyas obras no podían hacerse sin grade dispendio y gastos, mayormente en la construcción y conservación del azud por la rapidez del Río y el grande peligro á que estaban expuestas por sus continuas y fuertes avenidas, y la contingencia de que podía llegar á mudar el cauce y tomar la dirección por las mismas Partidas). En efecto eso debió pasar porque en realidad el que puso en marcha el regadío en la huerta de La Paúl (181 años después) fue Don Cristóbal-Pío, 5º conde Atarés y 24º Barón de Gurrea.
   
   En el mismo Pleyto de Aprehensión en el punto 6º dice así: Que en dicha Baronía había una partida la Paúl, la cual por los años de 1752 solo se componía de Prado y Monte, que por su buena calidad de tierra, había resuelto el Conde de Atarés reducirla a cultivo y poblarla para mayor utilidad de la Baronía y en beneficio del estado; y en efecto se hallaban ya establecidas nueve Colonos con sus Casas, que cultivan doscientas setenta cahizadas de tierra de regadío mediante una acequia del Río Gállego, y habían dado de producto al Mayorazgo á más de la décima, ochenta y cinco caizes de trigo anuales de treudo perpetuo; que por la distancia desde dicha Partida de la Paúl á los Lugares inmediatos, y por las frecuentes avenidas del Río Gállego se quedaban dichos Colonos algunos días sin oir Misa, motivo para que se vieran precisados á desamparar las Casas, y por ello se había edificado un Oratorio por el expresado Conde; pero no siéndole posible conseguir Sacerdote que les dixera misa, se hacía indispensable y había determinado previa la licencia Real, fundar una Capellanía nutual y amovible, con la renta de doscientos ducados de vellón anuales, á cargo de los productos de la Baronía, y sin perjuicio de los derechos del Cura de Gurrea; teniendo el cargo de decir Misa todos los días de obligación oírla, explicar la Doctrina Cristiana, y demás que se expresan (la Real licencia y facultad se concede con fecha 23 de febrero de 1786).



Antigua Casa del Conde en La Paúl









Primeras 11 casas (calle Mayor y plaza Mayor)


   Ya tenemos claro el año de la fundación, por el relato del Pleyto de Aprehensión, primeramente relata este Juicio (en 1791) la existencia de 9 casas, pero por su longitud en el tiempo hay otro momento del propio Juicio (en 1795) que expresa que ya hay 11 casas. Me llama la atención semejante error en cuento al número de casas en esos años, porque según el Arzobispado de Huesca en 1791 (39 años después de la fundación), había 49 familias; si bien es sabido muchas de ellas compartían "casa", pero no hasta el punto de vivir todas en 9 casas. Lo mismo ocurre en relación al año 1795, el pleyto relata la existencia de 11 casas y según el Arzobispado de Huesca había 51 familias.
   De todas las maneras nos vamos a referir ahora a los primeros habitantes y según los registros en el Obispado de Huesca fueron estos: 
   - En 1751 Casa Oliveros, estos eran naturales de Figueruelas y ya se encontraban habitando la Pardina de La Paúl junto con sus ganados, eran dos hermanos llamados Miguel-Antonio y Francisco Oliveros. 
   - En 1752 llega Casa Aso de Cortes de Navarra, en concreto José Aso con dos criados Juan Bome y Francisco Sarasa. 
   - En 1753 llegan Casa Continente, el matrimonio Miguel Continente y su mujer María García. Casa Novales, el matrimonio Antonio Novales y Teresa López de Figueruelas. Casa Felipe, de Farardués, Jorge Felipe y su mujer Rosa Aso, ademas de la hermana del primero Ángela Felipe y los criados Pedro Cuyral y Domingo Tortana y por último Casa Mazas, los hermanos José Mazas y José Mª Mazas y el criado José Hernández.
   - En 1754  llegan Casa Faure de Velilla de Ebro, concretamente los hermanos José, Micaela y Manuel Faure. De este año también son Casa Hernández, Pedro Hernández y su mujer María Cebrián, ademas de los hermanos de esta última llamados Manuel é Isabel Cebrián.
   - En 1756 llega Casa Vera de Serés, concretamente el matrimonio Francisco Vera (el barquero) y su mujer Ángela Tolón con sus tres hijos llamados Francisco, Antonio y María.
   - En 1758 llega Casa Guíu, Miguel Guíu y su mujer Micaela Giménez con su criado Manuel Uruen.
   - En 1760 figura Casa Fau, José Fau casado con Ángela Felipe Aso y también figuran la madre de esta última Rosa Aso y sus hermanos Joaquina y Mª Rosa Felipe Aso.
   - En 1761 llegan dos familias, Casa Arqued de Almudévar, el matrimonio José Arqué (el cartero) y Peregrina Fuertes y Casa Tolosana la más fuerte llegada en estos diez años, Lorenzo Tolosana casado con Gregoria Liso y su hija Mª Rosa Tolosana, además de los criados Manuel Sarraseca, Pedro Sarraseca, Cristóbal Sancho, José Sancho, Ramón Cuello, Juan García y Martín Sanmartín.

   No nos vamos a referir a más familias porque sería muy extenso, por eso les remito al libro publicado en 1999 titulado Las Casas de La Paúl. De todas las maneras si quiero aportar los lugares de donde llegaron los Quiñoneros (arrendatarios de quiñones, 1 quiñón = 2 hectáreas, 79 áreas y 59 centiáreas): Aínsa, Albored, Alcalá de Gurrea, Alerre, Almudevar, Ansó, Aro, Berdún, Biel, Bolea, Castilla, Castillo de Santía, Callén, Cervera, Cortes de Navarra, Fañanás, Farardués, Figueruelas, Guerrios, Gurrea, Izas, Jaca, La Almolda, Las Pedrosas, Lacorvilla, Larués, Linar, Los Anglis, Los Corrales, Luna, Marracos, Montañana, Montmesa, Murillo de Gállego Navardún, Piedratajada, Pinseque, Plasencia, Remolinos, Sabayés, Salvatierra, Santalecina, Santa Mª de Val, Sasa de Surta, Serés, Sierra de Luna, Tafalla, Tardienta, Torralba, Tudela, Uncastillo, Velilla de Ebro, Venta de la Violada, Zaragoza y Zuera.
   Hemos visto las 13 familias primeras, que ante la imposibilidad de oír misa algunos días por las crecidas del Gállego, el conde a través de Cédula Real dada en el Pardo el 23 de febrero de 1786 les construye una ermita en honor a San Bartolomé y pone cura ecónomo hasta encontrar párroco.

   La Descripción topográfica de la ciudad de Huesca y todo su Partido en el Reyno de Aragón. Del año 1792  (40 años después) y escrito por Don Pedro Blecua y Paul, en referencia a La Paúl dice:

   "Las Casas de La Paúl:
   Esta es una nueva población, que a expensas del señor conde de Atarés se estableció pocos años ha, y hay en ella once familias, labradores, a quienes dio su habitación y repartió 240 cahizadas de regadío de Gállego, con su presa de piedra y rama, que se mantiene a expensas de dicho señor, y sus arrendatarios, o quiñoneros cogen de ordinario: trigo, 300 cahíces; cebada, 150 cahices; avena, 50 cahices,; judías, 40 cahices y algo de seda. Aunque están sujetos en lo espiritual y temporal a la villa de Gurrea, en cuyo territorio se ha dispuesto esta nueva labranza; tiene su oratorio y un coadjuntor, o asistente, que mantiene dicho conde con aprobación de la Cámara, dándole para alimentos 200 ducados, con obligación de decirles misa y residir en la misma. Los confines de este pueblo y cotos redondos que se siguen, como territorio de Gurrea, son los mismos."

¿1752 O ANTES?. LOS PROLEGÓMENOS PARA QUE EN 1752 HAYA 11 CASAS: Como es sabido por los que hayan leído el libro "Diversa documentación sobre la Baronía de Gurrea", en el año 1729 se desertó la Villa de Gurrea, por diversos motivos y además a resultas de las guerras pasadas é invasión y robos que se hacían en sus términos por partidas de voluntarios (entre ellos Blas-Miguel, alías Mataguardias), abandonando sus moradores las casas y haciendas que poseían, y trasladándose estos a diferentes pueblos, pero el Conde de Atarés, por medio de carteles y en virtud de dicha convocatoria (la llamada Carta de Población), logró que concurrieran muchos para la nueva población, concretando con ellos la Escritura de 1729.
   El 5 de octubre de 1729, Dª Francisca Abarca de Bolea, condesa viuda de Atarés, intenta una nueva Carta de Población para la Villa de Gurrea, basándose en las Ordinaciones promulgadas por su marido en el año 1727, y aunque en un principio la aceptaron 20 vecinos, al final no se lleva a efecto por discrepancias de los vecinos de la Villa, debido a los mejores derechos que adquirirían los forasteros que llegaban respecto a los ya residentes.
   Sobre 1740 comienza el rajado de la tierra (roturación) para labranza en la margen derecha del río Gállego, algunas de ellas para convertirlas en regadío; las partidas de Llano de la Riba, Sotico de la Barca, Llano de San Cristóbal, Val de San Bartolomé, La Plana, Val de Gracia, Pardina de La Paúl y Las Faxas. Concretamente en la partida de las Faxas (el soto junto al barranco del Tejar) habían puesto en 1752 en cultivo dos porciones de terreno que el río había dejado útiles para ello, una de ellas de 5 cahizadas, ya la tenía errendada a treudo D. Francisco Alamán, teniendo riego, y la otra arrendada por D. Antonio Loscertales y D. Xavier Barrachina.
   Estos tres arrendatarios, para poder dar riego a estas tierras habían construido bajo su coste, una Muralla para empantanar las aguas del barranco del Tejar, costándoles más de 1500 libras jaquesas, pero no pudieron conseguirlo, según contaban los que ayudaron a su construcción, por lo violento de una barrancada que se la llevó. Después tuvieron que desmontar los restos de ella, empleando el Barón las piedras para sus obras, más concretamente en la partida de El Llano (La Traviesa).


La Traviesa de piedra.


VA A SER EL AÑO 1740: Sobre la Pardina de La Paúl, se narra que comienza también el rompimiento de tierras en 1740, con el cargo de la condesa viuda de Atarés de 80.000 ducados, para la construcción del Azud (La Estacada) y Acequia (Acequia Madre de las Casas de La Paúl), construcción de casas y arado de las tierras en beneficio de su hijo D: Cristóbal-Pío Funes de Villalpando Sanz de Latrás Abarca de Bolea. 
   La importancia de la partida de La Paúl, se ve en las cuentas de 1791 repasadas en el Pleyto de Aprehensión, mientras en Gurrea, por los quiñoneros tributados se cobraba anualmente 56 cahíces, 3 fanegas, 3 almudes y 3 cuartos, en los de La Paúl cobraban 90 cahíces, 1 fanega y 10 almudes y medio, que podrían ser más, porque el agua sobrante no llega al final de la huerta donde se quedan sin regar 10 cahices y 1 fanega.


Azud: La Estacada

CUANDO TE ADEUDAS CON EL CONDE EN 1793:   

   En el año 1793. Diez vecinos de la Villa de Gurrea y siete de La Paúl dicen: En cumplimiento con lo acordado por V.E en su Auto de quatro de Febrero del corriente Año en punto a la ... que solicitan diferentes vezinos de la Villa de Gurrea de Gállego sobre el Pago que estan deviendo, y atrasos a la Testamentaria del difunto Conde de Atarés Dueño Temporal que fué de dicho Pueblo, y en vista de lo expuesto sobre este punto por el Señor Fiscal y de la Certificación que de todo se me remitió en Causa Orden de 16 de dicho mes, he tomado las noticias mas seguras de los que son deudores de dicha Testamentaria, del importe de la deuda de cada uno, y de su posibilidad para el pago y modo en que pueden excrutarlo. Los deudores y deuda particular de cada uno son los que comprende la adjunta relación que acompaño a V.E y discrepa poco en lo que refiere a su censura el Sor Fiscal. Todos estos deudores se hallan constituidos en la maior infelicidad y miseria todos tienen excusados por la Justicia sus cortos Aprestos de Labranza, Casa y tierras de que depende su existencia; y todos se ven amenazados con la venta de esos cortos bienes en las Execuciones con que los Apremia dicha Testamentaria, que necesariamente havía de producir la despoblación, y tanto mejor en las circuntancias de haver procurado alguno de los interesados en ella cargarse con los bienes excusados y buscando de su cuenta Postores segun se me ha informado. La imposibilidad de medios de estar desde la renuncio ya el difunto Conde concediendoles espera, y aun el actual que ha solicitado revenirse de estos creditos con algun beneficio de los Deudores para esperar a que mejoren de fortuna. Esto parece que era lo que exigia la permanencia de la Población de Gurrea, la subsistencia de un considerable numero de familias, los intereses del Rey, los del Dueño territorial y hasta los mismos de la Testamentaria, antes que arruinarlos y exponerlos a a la major infelicidad y deserción de unos Vasallos que pueden ser utiles al Estado. En el concepto de que todos los referidos Deudores que comprende la Relación que acompaño son de los mas menesterosos del Pueblo y que no pueden pagar las cantidades que deven sin que se les vendan sus Haciendas y Aprestos y sin que expongan a la maior infelicidad a sus familias. Los Señalados con el numero Primero Antonio Cornelio Til, Antonio Navarro, Antonio Grasa y Thomas de Aso, podran hacerlo en el termino de ocho años pagando la deuda parte cada un año. Los cuatro que siguen señalados con el numero Segundo y que igualan a los primeros en la falta de medios siendo mas cortas sus deudas Antonio Sarraseca, Rafael Fillalvo, Antonio Montaner y Antonio Pilaces, podran pagarlas en seis años la sexta parte en cada uno. Los tres señalados con el Tercero Miguel Arqued, Martin Juan Liarte y Nicolas Dieste, podran satisfacer la suya en quatro años la quarta parte en cada uno de ellos. El notado con el numero Cuatro Joaquin Arqued, no tiene Casa, ni hacienda, ni otros bienes que lo que gana con su Jornal para mantener una numerosa familia y por lo mismo y aunque es corta su deuda a penar podra pagarla en ocho años. La viuda del numero Quinto, Viuda de Miguel Sarraseca, no tiene bienes algunos, se mantiene pordiosando y está absolutamente imposibilitada a pagar. Los Pupilos de Josef Mene, señalados con el numero Sexto han desamparado su Casa y Quiñon que ha caido en Comiso y por consiguiente se ha perdido esta deuda, como sucedería con las demas si se quisieran hacer efectivas. Esto es quanto he podido aberiguar para informar a V.E sobre este punto que me ha confiado; y en su Vista podrá dignarse resolver lo que fuere de su agrado. Huesca siete de Marzo de 1793. 

LOS QUIÑONEROS DE 1862:

Antonio Ortiz, Antonio Cebrián, Blas Marco, Francisco Marcuello, Francisco Lacambra, Francisco Aso y Ascaso, Francisco Bailin, Felipe Muro, Francisco Arqued, Francisco Sus, Genaro Aisa, Isabel Cassa, Jopsé Arqued y Gastel, José Arqued y Til, Juan Antonio Pardo, Joaquín Cebrián, José Sarraseca, Joaquín Asso, José Aranda, Mossen Francisco Reula, Lorenzo Romero, Luis Sanchez, Mariano Aisa, Mariano Ereza, Miguel Arqued, Miguel Asso, Mariano Arqued y Til, Miguel Arqued y Montaner, Miguel Pardo, Manuel Bailin, Manuel Arqued Sarraseca, Manuel Bercero, Mariano Arroyos, Manuel Sarraseca y Grassa, Miguel Trullenque y Crespo, Miguel Aisa, Melquiades Solana, Manuel Marco, Mariano Sarraseca y Grassa, Miguel Arqued y Lecha, Miguel Ara, Nicolas Arqued, Pascual Lacambra, Pascual Garcia, Pascual Sarraseca, Pablo Cucalón, Pedro Melero, Pedro López, Pablo Arqued y Lecha, Ramón Arqued, Romualdo Liarte, Ramón Cebrián, Ramón Cebrián Trullenque, Ramón Marco, Viuda de Juan Antonio Aisa, Viuda de Fausto Bayona, Viuda de José Til, Viuda de Joaquin Arqued y Montaner, Vicente Calón, Victorian Bercero, Vicente Calón y Til, Viuda de Joaquin Cebrián y Viuda de Rafael Irribarren.

MAPA DE COBRO DE LA BARONÍA:

El término de La Paúl en 1862, 5º pago rural


   Tras casi 200 años, pasando barones por La Paúl, a los cuales se les pagaba el arriendo de los quiñones y las cargas (décima y primicia), la baronía de Gurrea va entrando en declive; los quiñoneros van comprando las tierras (en algunos casos apropiadas), llegando la total desaparición de la baronía durante la guerra civil, con la muerte del último barón Don Nicolai Juan Megapano Papanicoli el 23 de julio de 1936.

   A partir de esta fecha el devenir del pueblo, como el de cualquier otro, siguió su curso hasta nuestros días. 

EL TEMA RELIGIOSOPero claro, a estas familias había que construirles un oratorio; así lo refleja eDiccionario Geográfico-Estadístico-Histórico de España y sus posesiones de Ultramar (1846-1850) de Pascual Madoz en su Tomo 9 y página 147, hablando de Gurrea de Gállego dice: 

   "una igle, parr. (San Nicolás de Bari) que comprende el anejo de las casas de Paul, cuyo curato de segundo ascenso se provee por S. M. .......... dentro de su circunferencia se encuentra un cast. arruinado con el nombre de venta de Violada y una ermita (San Bartolomé) sit. entre las casas de Paul."

   En el Periódico del Alto Aragón del día 31 de enero de 1999, en su página 6 aparece un artículo denominado "Nuestras Raíces" LA PAÚL: NACIMIENTO DE UN PUEBLO, basado en el Protocolo 11.788 del Archivo Histórico Provincial de Huesca, que dice así:

   "En 23 de febrero de 1786, dada en El Pardo, se expedía una Real Cédula refrendada por el secretario del Rey, don Pedro García Mayoral en el que se exponía: Que por el Excmo. Sr. Conde de Atarés, Barón de la Villa de Gurrea, dueño solariego y diezmador universal de ella, se había informado a S.M. que en dicha Baronía existía una Partida llamada La Paúl que, por el año 1752, solo se componía de un prado y monte de pastos y leña; y que conocedora su madre, la Condesa, de la buena calidad del terreno, resolvió que se cultivase para beneficio y utilidad de todos. Persistiendo en aquellos propósitos, logró que se establecieran nuevos colonos, dotados de casas, para laborar doscientas setenta cahizadas de tierra, regadas por una acequia que, desde un azud completo, conducía aguas del Gállego, allí cercano, de modo que, al presente, además de la Décima, producían al Mayorazgo ochenta cahices de trigo anuales de Canon enfitéutico -o treudo perpetuo-. Y que dicha recolección iría aumentando en proporción al vecindario y puesta en labor de nuevas tierras que, para cosechar pan, eran de las mejores del Reino. Y para su mayor bienestar, y deseando que los colonos y pastores que con sus ganados aprovechaban los pastos, tuviesen el debido auxilio religioso y pudieran oír Misa los días de precepto, sin tener que desplazarse a la Villa, a cuya jurisdicción pertenecían, que aunque sólo distaba media legua , las frecuentes avenidas del río no permitían en ocasiones el obligado paso de la barca existente, se había determinado erigir en la casa principal del Conde, levantada en el caserío, un oratorio, con puerta a la calle; pero pese a sus diligencias -decía el Conde- no hallaba sacerdote que quisiera atenderlo, y por esta causa acudía a la protección de S.M., solicitando su licencia para fundar una Capellanía nutual o amovible, dotada con la renta de doscientos ducados de vellón anuales, a cargo de los productos de la Baronía, sin perjuicio de los derechos del Cura de Gurrea, y bajo las condiciones que siguen:
   -Que el nombrado Capellán fuera confesor y dijera la Misa los días de obligación en los meses de mayo, junio, julio y agosto a las cuatro de la mañana; en los de marzo, abril, setiembre y octubre, a las cinco y media, y en los de enero, febrero, noviembre y diciembre, a las siete; así como la diría todos los domingos y fiestas de Nuestra Señora y Santos Apóstoles, explicando el Evangelio o un punto de doctrina, aplicándolas siempre por los titulares difuntos de la Baronía, por los que, también los domingos, rezaría, al final de la Eucaristía, un responso. Igualmente, rezaría el Rosario en los días festivos; y daría asistencia a los moribundos y a quienes, por cualquier causa, se la requieran.
   Indicaba así mismo, que el Patronato correspondería a los Barones, quienes satisfarían al Capellán, puntualmente, por terceros de cuatro meses cada uno, la cantidad asignada, y se le proporcionaría casa adecuada en la misma que poseían aquellos -la cual debería conservar y mejorar a sus expensas- , así como no se ausentaría sin licencia y guardaría, con todos, la mejor armonía.
   -Que, respecto a dicha solicitud, fue servido S.M. de pedir informe al Sr. Obispo de Huesca, de cuya Diócesis era la Partida de La Paúl, quien dio su conformidad, proponiendo que la Capellanía fuera perpetua y colativa, que los Capellanes fuesen presbíteros al tiempo de su presentación y que, para posesionarse, tuvieran la aprobación del Ordinario, decir Misa los días de trabajo al salir el sol y los festivos a hora más avanzada y no ausentarse sin dejar sustituto expreso y sin licencia. 
   -Que todo lo anterior se puso en conocimiento del Conde de Atarés, el cual manifestó que no ponía reparo alguno a las anteriores observaciones del Prelado oscense, y si deseaba aumentarlas, en el sentido de que los gastos necesarios para jocalias, aceite, cera y demás, deberían ser cargados a la Primicia de la parroquial de Gurrea, que percibía las de la Partida de La Paúl.
De todo lo cual, habiéndose visto en el Consejo de la Cámara, con informe favorable de su Fiscal, se dio cuenta a S.M. el Rey en 27 de enero pasado, quien dio su consentimiento y licencia para la referida fundación.
   En consecuencia, el referido 17 de marzo siguiente, reunidos en la ciudad de Huesca, el Doctor don Agustín López, Arcediano de Serrablo, Dignidad de la Santa Iglesia Catedral y Vicario General de la Diócesis, por el Ilmo. Sr. D. Pascual López Estaún, Obispo de Huesca y en presencia de don Fausto García de Mutiloa, vecino de Zaragoza, en calidad de Apoderado legítimo y especial del Exmo. Sr. D. Cristóbal-Pío Funes de Villalpando, Abarca de Bolea, Grande de España de primera clase, Conde de Atarés y Barón de la Villa de Gurrea, mediante Poder otorgado en testimonio del Escribano Real Miguel Delgado de Madrid, se procedió a erigir dicha Capellanía, obligándose cada parte a cumplir las estipulaciones aprobadas, contenidas en el documento precedente, actuando como testigos don José Ricafort y don Manuel Villanova, ambos ciudadanos oscenses.  
   Por cuanto hemos reseñado, la verdadera fundadora del caserío de La Paúl, en los términos de la Villa de Gurrea, fué en los años 1752, la Condesa doña Francisca Abarca de Bolea, mujer que fue de don José-Pedro Funes de Villalpando y Gurrea, Conde de Atarés y Señor de Gurrea. Su hijo y heredero fue don Cristóbal-Pío Funes de Villalpando, Gurrea, Sanz de Latrás, Abarca de Bolea y Castro, Conde de Atarés y del Villar, Señor de la Casa y Honor de Gurrea y de las villas y lugares de Alcalá de Gurrea, Agüero, Embún, Santa Engracia, Marracos, Callén, Ceballos, Santa Eulalia de la Peña y Lúsera, y de los castillos de Bellestar, Artasona, Hornos y Santía. Los Agudos y San Pedro de las Cañas, con las casas y pardinas de Violada, Alboret, Castillazos, Tabernas, Gazaperas, La Carbonera, La Ortiz, Ganzacos, Pedranas, Ascaso y Santa María del Villar, Señor de las Baronías de Quinto, Gelsa, Velilla de Ebro, Alforque, Bonastre y Castillo de Maramala, Figueruelas, Cabañas, Azor y Betner. Castillo y Villa de Estopiñan, Mas de Rufa, Espluga, San Quilez y Latrás; Señor de los lugares de Javierregay, Anzánigo, Arto, Sieso de Jaca y Belarra, de la Salina de Escalete y su Honor de San Juan de la Rue y Viscasillas; Patrono de los Conventos de Capuchinas de la ciudad de Huesca, del de la Santa Espina de Gelsa, de la casa de los P.P. Agonizantes de Zaragoza, y del sepulcro que los Atarés erigieron en el Monasterio de San Juan de la Peña, Gentilhombre de Cámara de Su Magestad, en ejercicio, Mayordomo Mayor de la Princesa de Asturias; Grande de España de primera clase, Caballero Gran Cruz de Carlos III y Caballero del Toisón de Oro. 



El patrono: San Bartolomé (fiestas 24 de agosto)

DICHO DE SAN BARTOLOMÉ: 

San Bartolomé se levantó
pies y manos se lavó
y con Nuestro Señor se encontró

Donde vas Bartolomé ?
Yo con vos Señor iré

Donde tu seas nombrado
no caerá piedra, ni rayo,
no morirá mujer de parto,
ni criatura de espanto,
ni labrador en el campo
Amén


En negro el volumen de la antigua ermita (1752), y tras las diversas obras (alargado, sacristías y torre), el resultado final.


Vista de la torre desde la calle Zaragoza





El fin de semana y el lunes de la Romería eran las fiestas pequeñas de La Paúl.


De todas las maneras, no vamos a referirnos más a la Iglesia, porque ya se habló extensamente en la charla que dí en La Paúl este mismo año 2011 y además vendrá explicado suficientemente y con detalles e imágenes en el próximo libro, pues es uno de los capítulos del mismo. No obstante si quiero poner fotos realizadas en su día por mi buen amigo José-María Buil Monzón, de antes de la restauración y pintado.


Altar de San Bartolomé


La Virgen del Rosario


San Antonio


Altar con la Purísima, el Sagrado Corazón y la Virgen del Carmen.


Cristo que sale en la procesión de Viernes Santo


Santa Quiteria


Incensario de La Paúl
(fue en 1999 a una exposición temporal de 3 meses del Museo Diocesano de Huesca y ya no regresó). Foto realizada por mí el 31 de marzo de 2015.